Comissions Obreres de les Illes Balears | 21 de desembre 2024.

LA SALUD Y LA SEGURIDAD, UN DERECHO FUNDAMENTAL EN EL TRABAJO

  • 28 DE ABRIL DE 2021 DÍA INTERNACIONAL DE LA SALUD Y LA SEGURIDAD EN EL TRABAJO

El 28 de Abril es la fecha elegida por el movimiento sindical para recordar a las compañeras y compañeros que perdieron la salud y la vida en accidentes de trabajo o por enfermedades profesionales. Es igualmente una fecha para denunciar las precarias condiciones de trabajo que están en el origen de estos daños.

28/04/2021.
Cartel 28 Abril

Cartel 28 Abril

14.842 accidentes de trabajo se han producido en Baleares en el año 2020: 14.100 en población asalariada y 742 en autónomos (datos provisionales enero/diciembre 2020 Ministerio de Trabajo y Economía Social). La cifra más dramática son las 7 personas fallecidas como consecuencia de un accidente de trabajo. Es cierto que tanto la cifra total de accidentes como la de fallecidos ha bajado considerablemente con respecto al año 2019, pero ello ha sido debido al acusado descenso de la actividad económica provocada por la Covid-19, y no porque las empresas hayan interiorizado la prevención de riesgos. La falta de cultura preventiva entre el tejido empresarial, unida a la inestabilidad laboral y a las condiciones precarias de empleo, caracterizadas por la enorme temporalidad y parcialidad de la contratación, generan el caldo de cultivo perfecto para el deterioro de la salud laboral. 

Como viene siendo habitual, los sectores donde se registra un mayor número de accidentes de trabajo son el de la construcción, comercio y reparación de vehículos, hostelería y actividades sanitarias y de servicios sociales. 

En el año 2020 se ha puesto de manifiesto de manera dramática la contradicción entre la salud y la vida y las presiones para mantener la actividad económica, mucho más allá de lo que aconsejaban los expertos en salud pública. Han sido las plantillas de los sectores ya conocidos como esenciales quienes han sufrido los estragos del virus de manera más directa y en muchas ocasiones, sin el debido reconocimiento por parte de las autoridades. En nuestra comunidad, se han notificado 150 accidentes de trabajo por Covid-19.

Recientemente (febrero de este año) se ha asimilado la Covid-19 a enfermedad profesional en el caso de los trabajadores sanitarios y sociosanitarios, en lugar de un accidente laboral, como se venía haciendo hasta ese momento. Pero esta es una medida insuficiente; desde CCOO exigimos que la Covid-19 se incluya en el listado de enfermedades profesionales, extendiendo esta cobertura a un mayor número de profesiones expuestas al riesgo y sin limitación temporal. 

Precisamente son las enfermedades profesionales la gran asignatura pendiente de la prevención de riesgos laborales en España y, por supuesto, en nuestra comunidad. En el año 2020 en Baleares se han comunicado un total 239 partes de enfermedad profesional, lo que supone un descenso de -50,31% respecto a 2019. Existe una diferencia importante en la distribución por sexo de los partes de enfermedad: 140 mujeres frente a 99 de hombres; pero a pesar de esa desigualdad, el porcentaje de partes con baja es idéntico en ambos sexos, un 46% El subregistro de este tipo de daños a la población trabajadora es un lastre para el sistema preventivo, porque lo que no se registra oficialmente no existe y lo que no existe, no se previene, sin olvidar que también supone una menor cobertura para las personas trabajadoras. El no reconocimiento de las enfermedades profesionales imposibilita la prevención de múltiples patologías relacionadas con el entorno laboral, en algunos casos muy graves o mortales, como por ejemplo, los cánceres de origen laboral.

A la vista de estos datos, es evidente que aún queda mucho por hacer. La Ley de Prevención de Riesgos Laborales cumple 25 años, pero todavía seguimos sin solucionar el altísimo grado de incumplimiento de la normativa existente. Reclamamos, además, la plena integración de la salud laboral en la salud pública, hoy con mayor convencimiento desde la experiencia de la pandemia, lo que exige una mayor coordinación entre salud y trabajo, tanto a nivel de la Administración General del Estado como a nivel de la comunidad autónoma. Es urgente además, dotar de mayores recursos tanto a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social como al Instituto Balear de Seguridad y Salud en el Trabajo. CCOO no dejará de denunciar las precarias condiciones de trabajo que están en el origen de esta lacra social. Nadie debería elegir entre trabajo y salud. 

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