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POR LA IGUALDAD REAL, CONTRA LA BRECHA SALARIAL

  • 22 DE FEBRERO DÍA DE LA IGUALDAD SALARIAL ENTRE HOMBRES Y MUJERES

El 22 de febrero, se celebra el Día de la Igualdad Salarial. En el año 2019 (INE) en Baleares la ganancia media anual de las trabajadoras alcanza los 21.631,07 €; en el caso de los hombres es de 24.914,51€. En otras palabras, las mujeres ganan de media 3.283€ menos. El salario medio de la mujer en Baleares tendría que incrementarse un 15% para equipararse al del varón. 

20/02/2022.
Eva Cerdeiriña, Secretaria de Polítiques Públiques, Socials i Salut Laboral

Eva Cerdeiriña, Secretaria de Polítiques Públiques, Socials i Salut Laboral

La brecha salarial es de un 13,18%; en comparación interanual 2018/19 disminuye un 0,53%. La remuneración media anual de las mujeres ha crecido entre los años 2016/2019 en 1.929€, dato que refleja una tendencia positiva al alza en comparación con la de los hombres, cuyo salario ha aumentado en el mismo período en 1.628€ . Sin duda, la subida del SMI en 2019 (de 767€ a 900€) ha contribuido a este dato positivo.

Si observamos las diferencias salariales según tipo de contrato, crece unas décimas la brecha salarial en los contratos indefinidos de un 15,31% en el 2018 a un 15,85% en el 2019. Las mujeres con contrato indefinido tienen una ganancia media anual de 22.798€, y en el caso de los hombres su salario es de 27.094€.  

La brecha salarial persiste y se mantiene con independencia de que el análisis se realice por edad, nivel de formación, sector. Así, por ejemplo, en el sector servicios ellas tienen una ganancia media anual de 21.746€, y los hombres 25.557€. Por edad, en la franja de 45 a 54 años, las mujeres obtienen una ganancia de 23.459€, 4.256€ menos que los hombres. La brecha salarial aumenta de forma significativa en el grupo de edad 35/44 años: de un 2,70% en el 2018 a un 11,05% en el 2019, año en el que las mujeres tuvieron una ganancia media anual de 22.208€ frente a los 24.968€ de los hombres.  

Brechas salariales que tienen su reflejo en las percepciones de los ERTES: en al año 2020 (Agencia Tributaria) las mujeres tuvieron un ingreso medio por este concepto de 10.274€, en comparación con la de  los varones que ascendió a 14.211€, siendo la brecha resultante de un 27,70% 

Como consecuencia de estas importantes, y persistentes diferencias salariales entre sexos, se produce igualmente una notable desigualdad en otras prestaciones: en el caso de la pensión media anual, las mujeres era de 13.199€ y 17.890€ para los hombres (Agencia Tributaria ejercicio 2020) . Esta brecha en pensiones se reducirá en los próximos años, gracias al nuevo complemento en las pensiones aprobado en el año 2021 un acuerdo logrado en el marco del diálogo social

Para CCOO, uno de los retos más importantes de la política en nuestro país hoy en día es erradicar la brecha salarial. Es imprescindible, por tanto, adoptar medidas desde diferentes ámbitos, que se complementen entre si, dado que no se puede olvidar que la discriminación salarial  es  el resultado de factores  como la persistencia de los estereotipos de género, las dificultades para la conciliación y el casi nulo  uso de la corresponsabilidad por parte de los varones, la falta de transparencia de las retribuciones, o la escasa responsabilidad desde el ámbito empresarial a la hora de desarrollar medidas tendentes  a cerrar las brechas laborales existentes. Son aspectos que se deben abordar con urgencia, y para ello contamos con dos potentes herramientas como son el Registro Salarial, obligatorio en todas las empresas, o la Auditoria Retributiva, obligatoria en todas las empresas que tengan un Plan de Igualdad. 

Otra herramienta que contribuirá a corto plazo a reducir la brecha salarial entre mujeres y hombres es la reciente subida del salario mínimo interprofesional a 1.000 € brutos mensuales. El perfil del principal beneficiario/ a de la subida será una mujer entre 16 y 34 años con un contrato temporal que trabaja en la agricultura o en el sector servicios, sector este último donde la contratación de las mujeres es mayoritaria. Y por supuesto la reforma laboral tendrá, tiene ya, un importante efecto positivo en la mejora de las condiciones salariales y laborales de las trabajadoras, gracias a medidas como por ejemplo la limitación en el encadenamiento de los contratos temporales, la eliminación del contrato de obra o servicio, o el establecimiento del convenio sectorial de aplicación para aquellas mujeres que trabajan en contratas y subcontratas.