Comissions Obreres de les Illes Balears | 3 de maig 2024.

Vota

La Fundación Ateneu de CCOO de les Illes Balears inaugura la Exposición Conmemorativa del 50 Aniversario del Proceso 1001

    La inauguración de la exposición, que se presenta en la sede de CCOO en Palma, ha contado con la asistencia de Nicolás Sartorius, abogado y militante histórico de CCOO que fue condenado en el proceso 1001 junto a Marcelino Camacho, entre otros.

    20/11/2023.
    Nicolás Sartorius y Josep Benedicto

    Nicolás Sartorius y Josep Benedicto

    Esta exposición rememora el Proceso 1001 que juzgó a destacados líderes de CCOO, miembros de su Coordinadora General. La detención y su posterior juicio se convirtió en un símbolo de la represión que sufrió el movimiento obrero durante el franquismo.A este respeto, Josep Benedicto, presidente de la “Fundación Ateneu de CCOO Illes Balears”, ha manifestado que la Dictadura pretendió dar un escarmiento a Comisiones Obreras y al movimiento obrero, pero se le giró en contra, puesto que provocó una enorme reacción de solidaridad en el interior de España y en todo el mundo democrático.

    Para Benedicto, el Proceso 1001 demostró la capacidad del movimiento obrero para articular la movilización social y convertirse en una pieza esencial en la lucha a favor de la democracia frente a la dictadura franquista.

    Y ha concluido que la exposición pretende recuperar la memoria de uno de los hechos que forjaron el largo camino a la libertad.

    Por su parte, Nicolas Sartorius ha manifestado que siempre es un buen momento para rememorar los hechos acaecidos en la transición, y más este año que se cumplen los 50 del Proceso 1001. “Un proceso por que se nos pidieron 20 años de cárcel por unos hechos pacíficos y que eran legales en toda Europa, lo cual fue un acto descomunal de represión”, ha manifestado. “Este proceso simbolizó la represión del régimen franquista, pero debe tenerse en cuenta que fueron muchos los trabajadores y trabajadoras que fuera de este proceso sufrieron penas por sus acciones como sindicalistas”.

    Igualmente, Sartorius ha reivindicado el papel que debe jugar la memoria democrática, ya que “si no hay memoria democrática, no hay una democracia muy sólida. Se debe crear una cultura democrática que se sustente sobre la lucha contra la dictadura”.

    La democracia no es una concesión, sino una conquista de la gente que se movilizó, no solo del movimiento obrero, también del estudiantil, del vecinal, de las mujeres, entre otros. Es fundamental que las nuevas generaciones conozcan esta parte de la historia en la que se forjó la democracia, ha concluido.